martes, 12 de abril de 2011

¿Debe MINI capitalizar su ingreso en el WRC?


Esta es la pregunta que se cuestiona Guillermo Alfonsin redactor del portal Autoblog.

Os dejamos con el articulo publicado en dicho portal sobre tan sugerente e incisiva cuestión. Interesante su lectura.


"Para que negarlo, cuando se comenzó a rumorear el retorno de MINI al Mundial de Rallyes, se me encendió una cálida sonrisa en la cara, pero se me apagó de golpe al saber que en lugar del tres puertas normal, sería el Countryman el modelo utilizado como base.

Desde el punto de vista comercial, lo cierto es que analizando la situación, la cosa tiene sentido. Por una parte, el modelo "normal" de tres puertas ya es la base de las operaciones en circuito de la marca, con las copas monomarca de distintos países. Por otra parte, el Countryman es el valuarte "todoterreno" de la casa, así que es lógico que sea el modelo escogido para "ir de rally".




Así las cosas, no queda otra que acostumbrarse a que "un coche alto" sea el encargado de defender los intereses de MINI en los tramos. Pero bueno, una vez superado el impacto, las pocas imágenes que hemos visto definitivas del modelo en su versión de asfalto nos han gustado.

Pero más allá de gustos y disgustos, lo que creo que debe tener claro MINI es que ha de capitalizar el hecho de competir en el WRC. Y es que más importante que ganar o perder carreras es que tus clientes sepan que las corres. Si no, que se lo digan a Mazda, que ganó Le Mans, y creo que todavía hay gente de Hiroshima que no se ha percatado de ello.

Y ¿qué mejor manera de capitalizar resultados que fabricar una variante de calle del coche de carreras? Hace unos lustros, Subaru y Mitsubishi nos regalaban los ojos y los sentidos con sus variantes "de calle" de sus coches de rally, como hacían también Lancia y Toyota poco tiempo antes por exigencias "del guión" (léase, exigencias del reglamento FIA de Grupo A).

Pero ahora que existen las regulaciones WRC, los fabricantes no se ven obligados a fabricar coches de calle derivados de sus máquinas de carreras. Así puede darse el caso del Citroën C4, pluricampeón del mundial de rallyes, que nunca contó en su variante de calle de un modelo "GTI" con auténticas prestaciones.




Es increíble, pero de esta manera, aunque Citroën puede fardar (sobre todo en su mercado local) de ser el coco de los rallyes, realmente los aficionados más quemados no la admiramos de la misma manera que si hubiera fabricado un C4 "racing" de calle.

Eso está cambiando con el DS3 Racing, pero sigue muy lejos de ser una bestia parda.

Otro ejemplo lo tenemos con Ford, que después de malacostumbrarnos con los Sierra y Escort Cosworth, decidió que los Focus RS fueran coches de tracción delantera. Eso sí, cualquiera de los dos RS son coches de lo más apetecibles para el aficionado "quemadillo", y al menos están claramente orientados hacia la deportividad sin concesiones, siendo de lo mejor de su categoría. Y el Fiesta RS ya está de camino...

Pero lo que yo quiero plantear es que si MINI entra ahora al WRC, creo que "su deber" es el de crear un Countryman JCW WRC de calle, que conserve la tracción integral, y la asocie a diferenciales autoblocantes, con un kit de carrocería de aletas ensanchadas "bien machote", con el que poder emular a Sordo y Meeke en tu carretera de curvas favoritas.



Vale, puede que el Countryman de serie no sea la mejor alternativa de diversión que uno ahora mismo se plantea cuando mira la gama MINI (yo antes iría, ya lo sabes, a por un R53 de los originales con kit JCW), pero si los chicos de la marca germano-británica se lo montan bien, podrían ofrecernos su crossover re-orientado hacia el asfalto, y crear un "anti-evo", al menos en cuanto a comportamiento y diversión de conducción, porque en lo que se refiere a motorización, será difícil superar los 211 caballos extraídos del 1,6 turbo de inyección directa (algo hasta 240 CV no sería del todo imposible).

No sé si igual peco de soñar despierto (aunque algunos ya apuntaban indicios de este camino), pero no se me ocurre una mejor manera de celebrar el retorno de los "brit" a los tramos. Vamos, MINI, regálanos un Countryman lleno de testosterona y mala leche. ¿No te gustaría a ti verlo?"


Fuente: Autoblog.


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