Un MINI Cooper 970S de 1964 ha logrado los 250 km/h de velocidad máxima en las llanuras de sal de Bonneville, en la categoría de motores de 1 litro.
Ningún cliente de MINI en 1964 se hubiera imaginado que uno de los MINI Cooper 970S de ese año iba a correr a 250 km/h algún día de un lejano futuro, en el año 2012. Los años han pasado y hoy en día los modelos de Mini de las primeras generaciones son ya clásicos. Pero además han sido convertidos a múltiples usos, jamás imaginados por Sir Alec Issigonis, algunos incluso convertidos para usar motores de moto.
Y hablando de motores, el motorcito de 970 cc del MINI de aquella época ha servido perfectamente para ejecutar este récord de velocidad en el desierto de sal de Bonneville, en donde año tras año vehículos de todo tipo tratan de mejorar récords de velocidad existentes.
Al MINI le tocaba la categoría de vehículos con motores de 1 litro o menos, logrando el récord después de varias pasadas en ambos sentidos y promediando 251 km/h de máxima. A esa velocidad, el equipo neocelandés que ha llevado el coche a EEUU, ha comentado que el MINI es casi imposible de conducir, principalmente porque se trató de conservar lo más posible la forma original del coche, nada aerodinámica por cierto. Sir Issignosis no lo diseñó para 250, sino para 120 km/h o tal vez menos.
Me hubiera gustado saber qué preparación tiene el motor o al menos ver algunas fotos del mismo, pero no va a ser posible gracias a que MINI Motorsport no ha dado detalles técnicos sobre el coche. Una verdadera pena.
Fuente: Highmotor.
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